sábado, 26 de diciembre de 2015

Somos mayoría

Somos mayoría los que tenemos que inventar mil formar de aumentar los ingresos y disminuir los gastos para sobrevivir a una inflación que padecemos, aunque desconozcamos su magnitud oficial.
Somos mayoría quienes hacemos cola y ruleteamos por una larga lista de supermercados cuando toca nuestro número de cédula.
Somos mayoría los que sufrimos por la escasez de medicinas o pañales.
Somos mayoría las víctimas de la inseguridad en sus diversas manifestaciones.
Somos mayoría los perseguidos por un gobierno para el que represión es sinónimo de gobernar. Represión a algunos por su opinión política, a otros por vivir en zonas del país donde el pueblo debe ser “liberado”, luego de haber sido estos mismos sectores abandonados por el estado y entregados al hampa.
Somos mayoría quienes queremos vivir honestamente de nuestro trabajo y poder darle una vida digna a nuestros hijos.
Somos mayoría los que inventamos mil formas de sobrevivir con éxito ante unas cartas al Niño Jesús que superaban nuestro presupuesto y tratamos de lograr que, pese a ello, la ilusión de la navidad siguiera presente.
Somos mayoría los que no estrenaremos nada para recibir el 2016.
Somos mayoría quienes fuimos a votar el 6 de diciembre buscando que nuestra voz sea por fin oída y nuestros problemas atendidos por nuestras instituciones políticas.
Y, sea cual sea la opción política que hayamos escogido, somos mayoría quienes queremos que las diferencias políticas que existen entre nosotros sean resueltas de forma pacífica, buscando acuerdos entre los actores políticos, sociales y económicos que nos permitan construir un futuro de prosperidad.
Solo una minoría busca desconocer el mandato popular del 6D. Solo una minoría se beneficiará de una eventual confrontación.
La tarea que tenemos en frente es cómo hacer que esa voluntad de cambio y paz pueda organizarse y expresarse para evitar un conflicto que solo agravará nuestros problemas cotidianos.

Ese es el único propósito en mi lista para 2016 (y espero que Dios y el Diablo no se lo tomen como un chiste).